Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

UN CAMINO DE EXPERIENCIAS Y BUENAS PRÁCTICAS

Instrumento para sistematizar experiencias significativas y buenas prácticas sobre el derecho la educación de niños, niñas y adolescentes en movilidad

Introducción

Desde que existimos los seres humanos, existe también la migración. Sin embargo, a veces, la migración puede ser compleja y traer consigo desafíos importantes. Por ejemplo, en América Latina y el mundo es todo un reto garantizar que niñas, niños y adolescentes en movilidad puedan gozar su derecho a la educación.

La buena noticia es que hay cada vez más gente con buenas ideas e iniciativas para incluir a esta población en situación de movilidad en los sistemas educativos. Están haciendo camino al andar y están creando experiencias nunca antes vistas para que la educación llegue a todas las personas. A todas, sin importar su nacionalidad o situación migratoria, su edad o su sexo, su condición de discapacidad o económica, su grupo étnico, cultural o de culto.

Sin embargo, es necesario que estas experiencias sean visibles: para inspirar a otras personas y para que el mundo sepa que este camino es posible y está lleno de alternativas. También para que sepan cómo aplicar en su propio contexto estas alternativas.

Sabemos que, si estás aquí, es porque tienes una experiencia significativa y valiosa que contar. Así que vamos a acompañarte para que, en conjunto, hagamos visible este camino de experiencias y de buenas prácticas.

Lo primero que vamos a hacer es ponernos de acuerdo sobre qué entendemos cuando en los temas educativos hablamos de una experiencia significativa o de una buena práctica. Así, quien llegue a esta página sabrá bien el material del que está hecho la ruta. 

En educación, una experiencia significativa es una acción o una práctica que: Crea alguien de la comunidad educativa o cualquier agente que implemente acciones para la inclusión educativa.
Puede mejorar al menos una dimensión del derecho a la educación y la inclusión educativa.
Se ha puesto en marcha recientemente, es decir, hace menos de tres años.
Necesita más tiempo para continuar y así poder probar sus resultados e impactos.
En educación, una buena práctica es un proceso que se realiza constantemente y: Ha demostrado que puede mejorar al menos una de las dimensiones del derecho a la educación y a la inclusión educativa. Lo reconocen dentro y fuera de la institución educativa en la que se lleva a cabo.
Se ha validado y evaluado. Tiene un impacto en las comunidades educativas, las instituciones o el país.